lunes, 15 de abril de 2013

Entre la Grandeza y lo Ínfimo



Hoy es de esos días en los que tengo el arduo deseo, incluso podría decir, la necesidad de escribir para intentar expresar todo lo que he sentido en un día tan emotivo como el que se ha vivido hoy en Carrión de los Céspedes, mi pueblo.

Mi hermandad, desde hace un tiempo viene organizando lo que son los fastos conmemorativos del L Aniversario del nombramiento de Nuestra Señora de Consolación como “Alcaldesa
Honoraria Perpetua de esta villa de Carrión de los Céspedes, con el título de Fundadora de la villa”
y entrecomillo porque es así como se encuentra reflejado literalmente en el acta de la sesión plenaria que el Excelentísimo Ayuntamiento de Carrión de los Céspedes celebró el 15 de Abril del año 1963. Esta efeméride  sinceramente me ha ilusionado bastante, y el pasado día nueve del mes de Octubre, si no recuerdo mal publiqué en un grupo de facebook que si bien no es oficial si es medio de intercambio de opiniones y experiencias de muchos hermanos, lo que a mi entender debería de organizarse no sólo por la magna efeméride sino también para celebrar como se debe el
Año de la Fe en nuestro pueblo, además del XXV Aniversario de la Sentencia que en segunda instancia, y recalcando con total exactitud lo que indica la primera de las mismas, reconoce el Patronato de la Santísima Virgen de Consolación sobre el pueblo y la Villa de Carrión de los Céspedes, reconociendo el derecho a San Martin como Patrón de la Parroquia, por ser el Titular de la misma y a la Virgen del Rosario, como Patrona de su hermandad, por la misma causa.

                Así que visto de esa forma este año de la Fe en Carrión de los Céspedes podría haber sido una completa fiesta del Cristianismo, con una hermandad volcada en la Evangelización pública, como es su misión, y mucho más en el año de la Fe, además celebrando que hace cincuenta años, unos hombres de bien, hijos de la Santa Iglesia Católica, quisieron  nombrarla Alcaldesa Honoraria Perpetua, con el título de Fundadora de la Villa, tal y como aparece en el acta de la citada sesión plenaria;  al acuerdo se llega porque la Hermandad de Nuestra Señora de Consolación, solicita que las instancias civiles del pueblo le reconozcan el Patronato a la Virgen de Consolación, ya que por entonces comenzaba cierto movimiento, de la Hermandad de la Virgen del Rosario, para intentar apropiarse del Título que por derecho histórico y desde tiempo inmemorial le pertenecía y le pertenece a Nuestra Señora de Consolación, la Corporación Municipal por tanto no sólo atiende la petición de la hermandad sino que agasaja a la Madre de
Dios con el nombramiento de Alcaldesa Honoraria Perpetua con el título de Fundadora de la Villa. Este problema que por los principios de la década de los sesenta del Siglo XX, comenzaba, la Iglesia lo “soluciona” en el año 1988, es decir, hará el próximo mes de Octubre 25 años, y también es una fecha para conmemorar. Este año de la Fe en Carrión tenía todos los ingredientes, para ser una fiesta del Cristianismo, una fiesta que llamase a cientos de jóvenes a vivir el Evangelio, acercándose a su hermandad, como en tantos lugares de Andalucía y de España se está haciendo, en Huelva, en Granada, en Jerez, en Cádiz… cientos de Sagradas Imágenes saldrán a la calle, tendrán Funciones extraordinaria, para unidas, a su Santidad el Papa, servir de semilla en este año de la Fe; y ahí quiero llegar,  en Carrión no será así, en Carrión el pueblo no puede ampararse al manto de su Patrona, como ya hiciesen por ejemplo para librarse de la epidemia de peste del año 1649  ¿y Por qué? Pues muy sencillo porque un problema que no tiene más de 60 años, una serie de personas quieren hacerlo inmemorial y no es así y porque la Autoridad Eclesiástica, que tan implacable se muestra otras veces, no sabe hacerse respetar porque no hace cumplir una sentencia que ya lleva 25 años dictada y ratificada,
Carrión de los Céspedes, como pueblo y Villa sólo tiene una Patrona, la Virgen de Consolación como así dicta en la sentencia en segunda Instancia del tribunal Eclesiástico que presidía don Francisco Gil Delgado Q.E.P.D.

En esta última semana,  los mismos que quieren hacer eterno un problema, que no lo es, intentaban coaccionar al Alcalde del pueblo para que no asistiese a los Actos Conmemorativos por el L Aniversario del nombramiento de Alcaldesa Honoraria Perpetua de Carrión de los Céspedes, y no lo digo yo; lo
dice el Alcalde
, que ha estado en el acto, porque las coacciones en este caso han tenido el efecto contrario al que perseguían, y eso es muy triste; no el no conseguir lo que se buscaba, sino el coaccionar a alguien, pero claro para que el hecho ocurra tienen que darse con personas con dos dedos de frente a la que es difícil amedrentar, como fue la corporación municipal de 1963, o como hoy ha demostrado don Ignacio Escañuela, persona que sin ser creyente, de una ideología completamente distanciada de la Iglesia, ha sabido estar en su sitio y cumpliendo su misión, ni más ni menos. Y eso yo lo echo de menos en la Autoridad Eclesiástica, ni los curas que durante los últimos años han estado en Carrión de los Céspedes, ni instancias superiores de la Archidiócesis de Sevilla, han sabido estar en su sitio y hacer cumplir su palabra y su Sentencia. Que este fin de semana el actual Párroco de Carrión diga que a partir de ahora sólo se va a referir a las hermandades por el título aprobado en las Reglas, es muy triste, no por nada, sino porque,
eso es lo que se tenía que hacer siempre, desde siempre y para siempre, desde que llegó y no sólo él, sino los anteriores que han querido ser ambiguos y la ambigüedad, queramos o no, da muchos más problemas que resuelve.

Por tanto y una vez aclarado los antecedentes, debo indicar que hoy acudía a Carrión un poco preocupado, en primer lugar porque debo reconocer que la presentación de los actos no cumplió con mis expectativas, y no me refiero al pregón, que no entraré en analizarlo, sino al Acto en sí, aunque eso si presentaron un Cartel Magnifico, una pintura preciosa que refleja el Señorío de la Hermandad, eso
unido al runrún que se oía sobre las polémicas anteriores descritas, hicieron que yo hoy fuese un poco desanimado al Acto, y para mi alegría mi hermandad me ha sorprendido, en primer lugar una gran cantidad de personas han acompañado a la banda de música de Carrión de los Céspedes y a la Junta de Gobierno desde la Plaza del Ayuntamiento hasta la Ermita, lugar que se ha abarrotado para poder vivir el acto tan emotivo que había organizado hoy, el Hermano Mayor ha dedicado unas sinceras palabras, llenas de corrección, estando en su sitio, todo lo que a un Hermano Mayor se le puede pedir. El Alcalde, ha hecho acto de presencia, para decir, que venía, para compartir nuestra alegría; que ni da,ni quita, que él es el Alcalde de todos los Carrioneros, todo lo que a un Alcalde se le puede pedir,  os digo la verdad y hablo desde mi más profunda ideología de derechas, este Alcalde, sea del partido que sea, me ha demostrado que sabe estar y que es fiel a sus principios y se ha ganado desde hoy todo mi respeto. El azulejo conmemorativo en honor a la Corporación Municipal de 1963 es precioso, perfecto, un gran acierto de la Junta de Gobierno que creo que hoy lo ha hecho casi todo bien, y digo casi todo, porque realmente no he entendido esa pequeña procesión con las Varas y el Estandarte desde el interior de la Ermita hasta donde estaba el azuelo aún por descubrir, pero bueno eso son pequeños detalles sin mayor importancia, que están dentro de la corrección o mejor dicho, del gusto personal.

En definitiva, que hoy en Carrión se ha congregado una Hermandad de 1500 personas para homenajear a la Corporación Municipal del año 1963 y rezar por el Alma de estos Hijos de la Santa Iglesia Católica, con un Alcalde que dejando atrás, otras obligaciones para hacer acto de presencia, haciendo algo que otros que perteneciendo a la Hermandad no fueron capaces de hacer y una Hermandad vibrante, llena de emoción y de devoción hacia la Madre de Dios con el único deseo de agasajar a su Patrona hasta agotar la más remota gota de amor de cada uno de los corazones de sus hijos, una Hermandad deseosa de dar testimonio público de fe, como lleva haciendo desde sus orígenes, una hermandad que como siempre me hace estar orgulloso de ella, me hace estar feliz en ella y me emociona en cada uno  de los acontecimiento que alrededor de ella me congrego. Y hoy aquí sabéis quien ha faltado, el pescador. Si, el pescador, no había ningún pescador dispuesto a echar las redes para intentar sacarlas repletas o quizás con sólo una pieza, que no es poca recompensa en la época en la que
vivimos, ha faltado el pescador, en su misión fundamental, no estaba en el momento que había que echar las redes al mar, quizás la misión del pescador sea otra, es más quizás su misión la esté cumpliendo fielmente, no lo sé, no estoy en Carrión para vivirlo ni soy quien para juzgarlo, lo que sí sé es que hoy el mar estaba cargado de peces y el pescador no ha echado las redes y esos peces no sé si volverán a pasar por debajo de nuestra barca, esa barca que lleva la Patrona de Carrión en sus manos y que la Iglesia ha elegido como parte fundamental del icono del año de la Fe. 
 
Fotos: Franc Pérez Herrera

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